Una gentil y hermosa giganta y su simbiótica relación con millones de diminutos.

Esta historia tiene lugar en "Gulliverse", un mundo en donde conviven varias razas de humanos con diferencias de tamaño drásticas entre ellos.

Prodigadianos - Brobdingnagianos - Gulliverianos - Liliputienses - Microputienses - (y otras más pequeñas).

Cada raza parece tener una pulgada de alto en comparación con el nivel anterior.

 De tal forma, que para un prodigadiano:

- Un Brobdingnagiano mide en promedio una pulgada de alto (2.54 cm).

- Un Gulliveriano parece tener un tamaño aproximado de 0.35 milímetros de alto (lo que mide un acaro de polvo)

- Un Liliputiense con un tamaño insignificante de 4.9 micrómetros (del tamaño de bacterias) es invisible a simple vista para él.

- Un Microputiense esta en lo más bajo de la existencia con 68 nanómetros de altura (del tamaño de un virus, pudiendo albergar a miles de millones en su cuerpo sin que el note alguna diferencia de que están ahí).

Durante siglos las razas más grandes han intentado vivir en cohesión con las razas más pequeñas, incluidos los microputienses, quienes hasta hace unas décadas habían pasado desapercibidamente por los prodigadianos) y tienen leyes vigentes que reconocen a las diferentes razas de personas iguales. 

Aunque en la práctica es más fácil promulgar que cumplir, y siempre existen aquellos prodigadianos que se enorgullecen de ser la raza más grande y a menudo expresan ese orgullo a través de medios destructivos en el que las razas más pequeñas resultan afectadas.

Es por eso que existen grupos de prodigadianos, en especial mujeres, que se han encargado de velar y salvaguardar a las razas más indefensas buscando brindarles un lugar mejor para vivir, usando acuarios de vidrio que simulan con mucha precisión los ecosistemas ideales para la vida; y en ciertas ocasiones, estas gentiles mujeres han sobrepasado el nivel, al convertirse, literalmente, en ese mejor lugar para vivir, convirtiendo sus cuerpos de un tamaño planetario, en prósperos y confortables mundos vivientes donde se puede crecer y vivir, teniendo una relación simbiótica con ellos.