- Text Size +
Author's Chapter Notes:

Tipo de capítulo: -Historia-



Lo que faltaba, ahora estoy escuchando cosas…

—¿Qué dijiste?

—¿No escuchaste? Jaa… jajaja… JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA

El rostro de la chica frente a mí se trastornó bastante, lo suficiente para decir que ella estaba haciendo una sonrisa malvada.

—Oye, ¿Estás bien?

—¡No deberías preocuparte por mí, en su lugar, por ti mismo!

He vivido muchos momentos extraños en mi vida… diría que este es uno de ellos, de los más extraños de paso.

Un momento después, se levantó y se puso de pie frente a mí viéndome desde arriba.

—Pobre ser inferior, tú… tu forma de vida no es más que algo sin importancia para mi mera existencia, ¿Me entiendes? ¡No significas nada!

Antes de que pudiera decir algo… Mi mundo se volvió oscuro.

—Dónde...

Inmediatamente sentí una fuerte brisa fría, al levantarme del suelo di un vistazo a los alrededores pero por alguna razón todo se veía borroso.

—¿Dónde estoy?

Empecé a caminar, intentando de deducir en qué lugar estaba ahora, la brisa era mucho más fuerte que la de una mañana habitual, el piso se sentía extraño y mi vista no alcanzaba a ver nada claro.

—Móóóónicaaaaa

Gritando su nombre, intenté contactarla… pero no haría falta.

Repentinamente se empezaron a sentir temblores, grandes movimientos en el piso y cuando mi vista se aclaró. Lo vi.

Estoy en una enorme habitación, una gigante, colosal, inmensurablemente grande… es… es la misma habitación en la que estuve hasta un momento y frente a mí… hay algo gigantesco que no logro identificar.

—¿Qué demonios…?

Al alzar la vista pude verlo. Un pilar negro que se elevaba hasta el infinito… una falda, y… Riedel estaba frente a mí, solo que de un tamaño incalculable.

—¿Ahora conoces tu lugar?

Pude reconocer el estridente sonido que viajó desde una gran altura como la dulce voz de Mónica pero a un volumen impactante. Di un par de pasos apresurados hacia atrás tropezando y cayendo de espalda, facilitándome el ver a la imposiblemente grande figura de mi amiga frente a mí.

—¿Lo entiendes…? No eres nada, ahora mismo… terminaré contigo.

—¿Eh…?

El pie envuelto por una media oscura cuyos tejidos pude ver y diferenciar con claridad que estaba frente a mí hace un momento, a una velocidad vertiginosa e imposible para algo de su escala voló en el aire y se posiciono sobre mí, ocultándome bajo su sombra.

—Como he esperado este día… es tu fin, Danny.

Ella… ¿Qué está haciendo ella?

Su pie empezó a bajar muy lentamente hacia mí, en cuestión de unos segundos, estaría directamente en mi lugar… terminando conmigo.

Por algún extraño motivo, no pude hacer más que ver como todo ocurría y no decir nada, pero mi garganta hizo la fuerza para intentar pronunciar las que serían mis últimas palabras, estoy aterrado pero a la vez siento tranquilidad… ¿Qué es… esto?

—Riedel, por… favor…—Sin darme cuenta, una lágrima había empezado a bajar por mi rostro, cerré mis ojos esperando lo peor.

Su pie se acercó lo suficiente… Y entonces…

… No ocurrió nada, esperé a que terminara con mi vida, pero nunca llegó. En su lugar, mientras esperaba la muerte inminente sentí una cálida sensación envolviendo mi cuerpo… un abrazo.

Al abrir los ojos todo había vuelto a la normalidad, pero la hermosa chica estaba abrazándome, con su rostro hundido en mi pecho.

—Perdóname… yo… fui demasiado cruel… no debí… —Un débil sollozo escapó de su boca.

No tuve la fuerza para decir algo en ese momento, sólo recibí su abrazo en silencio mientras sentía como dos lágrimas me recorrían el rostro. No entiendo nada de lo que acaba de suceder ni de lo que está sucediendo.

Diez minutos después, finalmente pude hablar nuevamente.

—Me acabo de imaginar algo muy raro… no sé por qu…

—No te lo imaginaste —me soltó.

Al alejarse de mí, pude ver su rostro empapado en lágrimas.

—¿P-pasa algo?

—Lo único que quería era asustarte un poco, pero… no sé controlarme, fui una idiota…

—¿Asustarme? No entiendo a qué te refieres.

—Lo que acabas de ver no fue algo que imaginaste, fue algo tan real como tú y como yo, Wakkun.

Sabía que la personalidad de mi amiga podía ser retorcida a veces, pero esto es algo distinto en cada dimensión, ni siquiera pude entender una palabra de lo que decía, primero pretende insultarme, después se siente mal por eso… y ahora ella me dice que lo que acabo de vivir fue real.

—Danny.

—¿S-sí?

El hecho de que me llamara por mi nombre me sorprendió un poco.

—Necesito toda tu atención y… comprensión, entiendo que lo que te diré ahora no tiene ningún sentido, pero tienes que creerme… cuando me creas, te lo demostraré, pero no sin que antes hayas aceptado lo que dije, ¿Entiendes?

—Claro, bueno, creo que entiendo.

Dando un profundo suspiro después de haberse sentado nuevamente en la cama, ella me vio con sus perforantes ojos rubí brillantes, esos ojos que sientes que podrían ver a través de ti y de tu alma.

—Yo… yo soy algo parecido… no, podría decirse que… —Intentando buscar la palabra correcta, ella se trabo por un momento, pero después de quedar en silencio, al fin aclaró—. No me gusta usar este término… pero es algo parecido a una diosa.

—Una… diosa…

—N-no exactamente una diosa, es… es un término aproximado, no soy exactamente el concepto de una deidad p-p-pero es algo similar, digo, por las cosas que puedo hacer y… bueno... ¡Sólo no te lo tomes literalmente!

¿Mi hermosa amiga de preparatoria es una diosa? ¿Estamos jugando a alguna especie de juego?

—Entonces… ¿Por qué eres una diosa?

—Puedo hacer lo que sea, con puntuales limitaciones, pero básicamente puedo realizar cualquier cosa.

—¿Puedes…? Em… ¿Hacer aparecer un vaso de agua?

En su mano, de la nada un vaso lleno de agua se materializó instantáneamente, hace un segundo no estaba, y al siguiente ella lo tenía en su mano. Me quedé congelado, la verdad es que ahora mismo estoy aterrado, ¿Por qué estoy aterrado de mi amiga? ¿Porque ella puede hacer lo que sea y lo acabo de descubrir?

—No… no tengas mie-

—Lo que pasó hace rato, ¿Lo hiciste tú?

Con una expresión bastante triste, ella asintió.

—Quería gastarte una pequeña broma, pero cuando te vi de ese tamaño me vi demasiado tentada… no pude evitar querer hacerlo, pero cuando me di cuenta de lo que hice… —Nuevamente, sus ojos se llenaron de lágrimas.

—Lo siento… pero no puedo comprender esto con claridad, ¿Puedes darme un momento?

—Claro, no te preocupes.

Mi mente estaba detenida, no hay nada en lo que pueda pensar claramente ahora, yo… estoy intentando de digerir no sólo lo que me acaban de decir, si no lo que acabo de ver y vivir.

—Me… ¿Me odias? —Su voz se quebró diciendo esas palabras.

—Eh… —No pude responder inmediatamente a eso dado que mi mente estaba trabajando a su máximo potencial en buscar una forma de asimilar esto, pero luego de un momento analicé sus palabras—. ¿Odiarte…? ¿Por lo de hace un rato?

Ella asintió en silencio.

—No… no creo que debería odiarte por eso, digo, a pesar de que literalmente casi muero del susto, sólo estoy un poco molesto… pero no te odiaría por algo así… demonios… aún me tiembla todo el cuerpo…

Casi como si le hubiera dicho a un niño que le iba a comprar un dulce, su expresión cambió completamente con sus ojos iluminándose debido a la humedad en ellos y haciendo una gran sonrisa.

—¿¡No me odias!?

—¡Ya te dije que no!

Aun con esa sonrisa, sus ojos volvieron a desbordar lágrimas e hizo un puchero, ¿Qué tanto le preocupaba eso?

—¡Daannyy! —Saltando hacia mí, me envolvió en sus brazos nuevamente pero esta vez poniendo su cabeza sobre mi hombro—. ¡Gracias! ¡Perdón! ¡Muchas gracias!

—¡Oye! ¡Dije que no te odio pero sigo algo molesto, levántate!

Apenas lo dije, ella se colocó de pie y volvió a su posición previa.

—Lo siento…

—No tiene caso, pero… en serio, estoy haciendo todo lo posible por entender esto; en resumen, ¿Puedes hacer cualquier cosa? ¿Puedes volver la ficción realidad? ¿Puedes destruir cosas? ¿Crear cosas? ¿Todo de todo?

—Eso… tiene un límite —dijo poniéndome un alto—. Por eso precisamente no me gusta que me digan diosa en el sentido literal de la palabra… hay una única limitación que tengo a la hora de poder hacer lo que sea.

—Ah, discúlpame, no te volveré a llamar así si no te gusta, ¿Qué es eso que no puedes hacer?

—No te preocupes por llamarme así, pero… te lo estás tomando muy bien… vaya.

—Tú habla, mis neuronas están trabajando a un 1000% ahora mismo, siento casi como si fuera un sueño…

—Bien, bueno, mi límite es que… no puedo revivir a alguien.

—¿Conoces el motivo? ¿O sólo es algo que es así por qué sí?

—De hecho, la razón por la que no puedo revivir a alguien es algo que he concluido por mí misma, lo he interpretado de la siguiente manera; no puedo manipular el alma humana, ósea, sí es algo posible para mí revivir a alguien en el sentido estricto de la palabra, pero cuando una persona muere su alma se desvanece y es algo que no puedo recrear, lo que puedo crear es un suplemento de alma el cual hace que esa persona posea el mismo cuerpo del fallecido, pero sus recuerdos, su personalidad y la persona como tal no es la misma, sólo un constructo hecho por mí…

—¿No puedes construirla sobre la base de la persona que era? Me refiero, a que si conoces esa persona muy bien, podrías recrear su alma en base a esa personalidad y de paso, los recuerdos se almacenan en el cerebro, por lo que si ese alma usa el cerebr…

—Wakkun, no es la misma persona… eso es todo —al decir eso su tono se tornó frio y algo deprimente.

—E-entiendo…

Opté por no seguir ahondando en el tema de su limitación, al fin y al cabo ella es quien más conoce sus capacidades… de hecho, todavía me parece imposible que yo esté pensando en lo que me acaba de decir como si fuera un hecho, en el de que mi amiga es prácticamente una diosa que puede hacer cualquier cosa, si no fuera por lo que acabo de ver, yo no me tragaría nada de lo que dijo

—¿Es todo?

—¿Es todo? ¿Sólo eso opinas?

—No… bueno… tienes razón, literalmente es todo, no hay nada más que pudieras contarme una vez que me digas que “puedes hacerlo todo”.

—Exacto… je…

—Lo siento si sueno algo estúpido, pero mi percepción de la vida acaba de cambiar totalmente en estos últimos minutos, no creo que puedas culparme, después de todo… lo totalmente imposible se acaba de volver un hecho justo frente a mí, mi proceso de pensamiento está un poco MUY entorpecido en este momento.

—Sí, te lo estás tomando mejor de lo que esperaba, te daré todo el tiempo que necesites para asimilarlo.

¿Para ella esto es tomarlo bien? Estoy totalmente confundido, no sé en qué pensar.

—¿Quieres que te traiga algo de té?

—Por favor, necesito beber algo —no dejé de ver el suelo de madera pulida oscura mientras pensaba en todo esto.

—Así te dejaré un momento solo para que lo pienses todo, ¿Ok? —Al decir eso, se levantó y colocándose sus pantuflas nuevamente, abandonó la habitación.

Entonces… una diosa.

***

Más o menos treinta minutos después, con una taza vacía de té a mi lado fui capaz de asimilar casi por completo la situación en la que me encontraba, al menos la mayor parte, por lo que ya puedo pensar como una persona normal.

—¿Te molesta si te hago algunas preguntas? No quiero que sientas que te estoy interrogando…

—Claro que no, adelante.

—Bien… lo primero de todo, ¿Alguien más sabe de esto?

—Nadie, los únicos en el mundo que sabemos de esto somos tú y yo.

—Lo que nos lleva al segundo punto y creo que el más importante… ¿Por qué me dices esto?

—Porque me gustas.

—Claro, porque te gus…

***

Más o menos otros cinco minutos después volví a recuperar mi capacidad para pensar con normalidad.

—Te gusto…

—Así es —Riedel afirmó con total seguridad de sus palabras.

—A Riedel Mónica, yo, Danny Wakahisa, le gusto.

—Sip, Wakkun, me gustas —una vez más, sin pizca de duda.

—Claro, llevamos tiempo siendo amigos, es normal que nos gustemos ya que siempre hablamos de todo tipo de cosas jajaj…

Un segundo después de forzar la risa, sus dos brazos pasaron a mi derecha e izquierda aterrizando sobre el escritorio atrás de mí con fuerza y haciendo un ruido contundente, una especie de kabe-don en el que la presa es el chico y está sentado, un concepto tan fresco como la brisa del inicio de primavera.

—No me gustas como amigo, tonto, me gustas de amar, como interés amoroso.

—Claro… —Bajé la mirada—. Entiendo…

—¿Seguro que entiendes?

—Sí… lo siento por ser grosero

—Bueno, no se le puede hacer nada, es normal cuando una chica tan hermosa como yo lo dice así jajaja —apartándose de encima de mí, rio usando su mano para batir su largo cabello.

—En esencia sí, es así.

—Q-q-q… —Casi como si toda la confidencia de hace un momento se hubiera esfumado, su rostro se enrojeció mientras me veía con una expresión impresionada—. ¡¿Qué dices?!

—Es la verdad, eres la chica más hermosa, de las más inteligentes y la más amable de nuestra escuela, nunca esperé que alguien tan increíble como tu podría gustar de mí… Oye, ¿Huele a quemado?

Su cuerpo se desplomó sobre la cama, su rostro estaba peligrosamente rojo y de su cabeza estaba saliendo vapor.

—¡Oye!

—Creo que no podré sobrevivir al ataque…

—¡Quédate conmigo! —La tomé de los hombros dramáticamente viéndola a los ojos.

—No puedo… lo siento…

—¡Riedel! ¡Rieeeeedeeeeeeel!

—Ejem, te daré un consejo… Wakkun, sé menos agresivo cuando le des cumplidos a alguien que se te acaba de confesar…

—Lo siento… otra vez —me senté en el piso frente a la cama, mientras ella estaba sentada con sus piernas cruzadas justo frente a mí yo permanecí viendo el suelo.

—Entonces… —Su voz preguntó con un tono de nerviosismo claro—. ¿Qué piensas al respecto?

—¿Que qué pienso? Bueno…

—Puedes levantar la cabeza, tonto.

Al alzar mi vista, ella me estaba viendo muy de cerca.

—Una chica se te acaba de confesar, tienes que hacer algo.

—S-sí claro, es lo lógico…

A decir verdad no tengo ni idea de que responder, nunca pensé que una chica se me fuera a confesar, de hecho toda mi vida pensé que yo sería el que se fuera a confesar, pero dada la situación fue todo lo opuesto… y no sólo eso, si no que la chica más hermosa y popular de mi escuela fue quien se me confeso, la última persona en el mundo de quien pude haberlo esperado.

La chica que me aceleró el corazón el primer día que la vi ahora era la que tenía su corazón acelerado debido a mí.

—Esto es muy repentino… perdón por actuar como un completo idiota…

Sentí suaves golpecitos en mi cuero cabelludo, una mano empezó a acariciarla con ternura.

—Claro que no, de hecho, estás siendo mucho más compresivo de lo que pude haber esperado de alguien al que se le confesaron, y de paso, le dijeron semejantes cosas como de las que te acabas de enterar, jeje.

La sensación de su mano acariciando mi cabello fue algo de otro mundo, sentí como si a través de su mano una especie de energía dulce empezara a llegar a mi cuerpo, si me hubiera distraído aunque fuera un poco, caería dormido.

Tomé una decisión.

—Riedel —coloqué las manos sobre el suelo y me levanté frente a ella, viéndola directamente—. Yo… em… EJEM, ¡MÓNICA! —Llamarla por su nombre requirió más de mi valor de lo que pensé que necesitaría.

—¿Sí?

—Tú… tú… digo, no sé si qu… c-claro que… em… sólo quiero decirte que… ah…

—¿Qué te gusto desde que me viste por primera vez y aun sientes algo por mí, así que quisieras que accediera a salir contigo?

—Exact… ¿¡CÓMO SUPISTE ESO!? —Tanta sangre subió a mi cabeza en un momento que pude sentir por mí mismo el tremendo enrojecimiento facial que debo estar sufriendo.

—Era lo que querías decir, como estabas atascado ahí decidí ayudarte, puedo leer tu mente.

—Tsch —chasquee mi lengua—. Con que también puedes hacer eso...

—Así que si algún día piensas en engañarme…

—¿¡Ni siquiera hemos empezado a salir y ya me estas acusando de ser infiel!?

—¡Era broma! Jajajajaja —la aterradora chica empezó a girar en su cama con un ataque de risa, lo cual ciertamente no era para nada aterrador.

—N-no lo hagas… —Aparté mi vista apenado.

—Jaja… ja… no te preocupes, no leeré tu mente, sólo lo hice en este caso porque era lo más visible que tenías en tus pensamientos, no vi nada más, lo prometo —se limpió una lágrima en su ojo derecho—. Estoy tan feliz… aunque estas lágrimas sean de risa.

—Entonces…

—Sí Danny, acepto salir contigo, gracias por hacerme la chica más feliz del mundo —una sonrisa más radiante y sincera de lo que nunca antes hubiera visto en su rostro se dibujó.

No creo… ser merecedor de ver algo así.

—Soy… el novio de Mónica… LA Mónica Riedel, la chica con la que todos los chicos sueñan siquiera con tener una amistad… Ah… ehm… ¿Está bien si nos llamamos por nuestros nombres tan rápido?

—Claro que está bien, Danny —ella rio un poco al pronunciar mi nombre—. Sé que es un poco arrogante no ser consciente de tu propia fama cuando es algo tan obvio, pero a veces creo que exageran su admiración por mí, ustedes son tan básicos… chicos, con mostrarles una cara bonita pierden la cabeza.

—No es sólo tu apariencia… Mónica, ¿Nunca te has percatado de la presencia que emites?

—Presencia… no, en lo absoluto ¿Poseo algo así?

Y pensar que algo que todos pueden sentir proviniendo de ella ni siquiera existe para su portadora.

—Nunca imaginé que no fueras consciente de eso…

—¿Hm?

—Es difícil de explicarlo, pero… es como si subconscientemente tuvieras una especie de seguridad en ti misma o… ¿Una personalidad fuerte? Sueles arrastrar a las personas sin que estas se den cuenta, ¿Nunca te fijaste en que todos te siguen cuando haces algo?

—¿Cómo aquella vez en nuestra obra de teatro?

—Exac… ¡¿QUÉ ERA ESO?!

—Simplemente vi a todos tan aburridos en el público que hurgue un poco en sus mentes y vi lo que querían, ustedes también… se veían aburridos y no estaban metidos en el papel, decidí ayudarlos.

—¿Tú no manipulas a la gente con tu poder para que te sigan?

—¿Eh? Claro que no, lo hacen porque lo quieren hacer.

—Y yo que pensé que había dado a la fuente del asunto…

—En primer lugar no tenía ni idea de que ustedes vieran eso del aura en mí, no tenía ni idea de que poseía algo así.

—Ahora me siento como un estúpido…

Ella suspiró sin nada que pudiera decir al respecto.

...

Después de unos minutos hablando, recordé algo que la peli rosa despreocupada había mencionado hace un rato.

—Oye, no dijiste que cuando te creyera, ¿Me lo mostrarías?

—Ah, tienes razón, lo había olvidado… je.

Pude ver algo de duda en su cara después de decir eso.

—¿Algo te preocupa? —Cuestioné.

—¿No te importaría… después de lo que ocurrió hace rato? Digo… no me extrañaría si tuvieras una especie de trauma o rechazo…

—Ah… sí, lo siento si esto podría sonar algo hiriente, pero de hecho sigo algo asustado de ti, saber que puedes hacer cualquier cosa… bueno, hace que esté un poco preocupado.

—¿No confías en mi…?

—¡N-no! ¡Claro que sí! Si no lo hiciera estuviera aterrado ahora mismo y hubiera salido corriendo por esa puerta, de hecho. A lo que me refiero es que… cuando sabes que tiene el control total de una situación, sientes algo de respeto o miedo por esa persona, ponte en mi lugar, si fueras un ratón frente a un gato ¿No tendrías algo de miedo aunque el gato haya prometido que no te comería?

—Entonces soy un gato… —Ella acarició su barbilla con una mano, pensando en algo.

—No estamos sintonizando la misma frecuencia después de todo…

—¡Es una broma! Claro que te entiendo, tampoco esperé que confiaras en mí de una vez, me ganaré tu confianza poco a poco, hasta que veas que no tienes absolutamente nada que temer.

—Lo agradecería, pero tampoco te fuerces demasiado, confío en ti —sonreí.

—Bien… creo que ya lo tengo, te haré dos demostraciones.

Algo me dice que esto será algo demasiado violento para llamársele una experiencia educativa.

—¿Estás listo?

—Sí —asentí con la cabeza.

—Y ya sabes, veas lo que veas, debes saber que bajo NINGUNA circunstancia te haré daño… —Empezó a hablar de manera severa—. Danny, tienes que saber que bajo absolutamente ninguna circunstancia, ni cuando juegue una broma, ni cuando este feliz, triste o molesta, te lastimaré realmente ni a ti ni a NADIE aprovechándome de mi poder. Necesitas estar más seguro de eso que de que tu nombre sea Danny Wakahisa, ¿Me entiendes?

—Pareces muy seria al respecto.

—Prométeme que te quedó totalmente claro.

—Está bien está bien, lo prometo, no me harás daño bajo ningún circunstancia existente, lo comprendo.

—Bien… ahora, cierra los ojos.

Hice como ella demandó. Un momento después todo mi cuerpo empezó a sentirse extraño, como una sensación de hormigueo que no duró más de dos segundos, en un instante ya se había ido completamente, lo siguiente fue nuevamente una brisa gélida que se repitió a intervalos constantes de tiempo.

—Puedes abrirlos.

Su voz resonó en mi cabeza.

—¿Eh?

Tuve una impresión aplastante en todo mi cuerpo al abrir mis ojos lentamente, lo que había frente a mí fue prácticamente imposible de identificar hasta pasados unos segundos, el inmenso rostro de mi novia se extendía por lo que parecían kilómetros y kilómetros de distancia, parece que esa brisa gélida es su simple respiración y aparentemente yo estoy en la palma de su mano frente a su rostro, desconozco la distancia de lejanía entre ambas su rostro y su mano.

—Oh lo siento, ya arreglo eso —dijo sin abrir su boca.

Aparentemente ella me está hablando telepáticamente.

Al momento siguiente, la brisa helada cesó y la vi abrir la boca.

—Ya puedo hablar normalmente, modifiqué tus sentidos y tu cuerpo para que sientas esta experiencia como si fueras de tamaño normal, no queremos que tu cuerpo salga volando cuando respiro y hablo sobre ti o que tus tímpanos exploten cuando hablo tan cerca, dado que de ese tamaño cualquiera de las dos opciones y muchas más son perfectamente factibles.

No pude evitar que verla abrir la ahora gigantesca cavidad que era su boca me hiciera retroceder un poco, pareciéndome que tan fácilmente me podría quedar atrapado ahí adentro, una sensación primitiva de miedo que surgió en mí aunque supiera que Mónica sería incapaz de hacer algo así.

—¿Tienes miedo?

—No exactamente… es más como… un principio humano de correr si ves peligro aproximarse, ¿Sabes? No importa cuanta confianza te tenga, por ahora tengo que acostumbrarme a esto. Pero por sobre todas las cosas te voy a rogar que no me juegues bromas potencialmente letales para mi corazón.

—No te preocupes, no planeo hacer nada por el momento —su sonrisa fue equivalente a la cantidad de veces que se multiplicó su tamaño, más cálida a la par de maliciosa—. ¿Me crees entonces? O quieres ir más abajo aun...

—¡E-estoy bien, en serio!

—Bien, entonces en su lugar, ahora iras en la dirección opuesta junto conmigo.

—¿A qué te refieres?

Por alguna razón esas palabras me crearon cierta incomodidad que se manifestó como un escalofrío en mi espalda.

—¡Ya lo veras!

Esta vez no tuve oportunidad de cerrar los ojos voluntariamente, mi vista sólo se tornó totalmente negra, cerré los ojos en algún momento sin darme cuenta, entonces sentí ese contacto gentil y agradable contra mi cuerpo, de la misma manera en la que se siente un abrazo.

—¡Puedes abrirlos!

Al abrir los ojos lentamente, las únicas cosas que pude ver fueron… casi literalmente, nada, negro, negro hasta donde mis ojos alcanzaban a ver, y una figura femenina fuertemente aferrada a mi cuerpo, eso fue lo único que pude ver en este basto vacío.

—¿Dónde estamos?

Mónica dio dos pasos hacia atrás alejándose lo suficiente de mí para enseñarme su mano.

—Mira aquí.

Había una pequeña bola muy brillante en su mano, acerqué mi rostro a la hermosa esfera que parecía un artículo de joyería increíblemente caro, sin ni una pista de lo que podía ser, ladee mi cabeza intentando identificar algo en su interior.

—Es el universo.

Me paré recto y mi columna vertebral quedó totalmente erguida, viendo su rostro, bajé mi vista lentamente a la pequeña esfera en su mano.

—Eso es…

—Para ponerlo sencillo, hice crecer nuestros cuerpos tanto que la existencia misma es esta pequeña bola de aquí, ¿No te parece hermosa?

—¿Dónde estamos ahora? —Empecé a ver de un lado a otro algo preocupado por el estado mental que alguien de mi edad… no, que cualquier persona debería tener debido a esto.

—No tengo idea, esto es todo, aunque siga creciendo y esta esfera no se vuelva más que una partícula subatómica para mi nivel, este espacio negro no termina nunca, he estado creciendo todo lo que mi mente me permite asimilar y nunca he salido, supongo que simplemente es el fin de la existencia, puedes caminar por toda tu vida y no encontraras nada en ninguna dirección.

Mi respiración se volvió pesada y juraría que pude oler mi cerebro friéndose.

—¿Quieres que volvamos?

—Por favor…

La siguiente vez que parpadee después de eso, ambos estábamos en la habitación de la encarnación de Dios mismo. Aunque con una pequeña diferencia, la esfera de hace un momento seguía en su mano.

—¿E-eso no es…?

—No te preocupes, es una réplica inanimada, lo único que conserva es la belleza, no tiene seres vivos en ella.

Una cadena apareció justo frente a ella, la cual atravesó la esfera y sirvió de una especie de dije.

—Este collar —tomó la cadena y la puso alrededor de su cuello—. Será el collar que indique del día en que te revelé mi mayor secreto, Danny.

La réplica del universo ahora colgaba entre sus pechos. Con esto, creo que mi cabeza tuvo suficiente por hoy.

***

—Bien, volveré a casa.

El sol ya se había ocultado y estaba oscuro afuera por lo que decidí volver.

—¿Seguro que no quieres quedarte?

—Necesito un tiempo a solas para asimilar de manera correcta todo esto, una buena noche de sueño lo arreglará, pero por ahora, necesito al menos un poco de soledad.

—Entiendo, no puedo pedir tanto.

—Prometo que te lo compensaré otro día.

—No tienes que compensarme nada, de hecho… yo debería compensarte la manera cruel en la que actué antes.

—Ya dije que no pienses en eso, solo se te pasó la mano un poco, como dijiste antes, nunca pensaste en hacerme daño realmente, ¿Verdad? Ya no estoy molesto, así que no le des importancia y ahora que conozco tu secreto, veo difícil que me vuelvas a asustar de esa manera

Su inseguridad se volvió en malicia terriblemente rápido.

—¿Crees que sea imposible?

—No te voy a retar…

—Oww…

—Después hablaremos de esto mejor, por ahora, iré a descansar —me giré con mis zapatos puestos y me dispuse a salir por la puerta cuando…

—Gracias…

Sus manos se juntaron en mi pecho, sus pechos se pegaron contra mi espalda y pude sentir otra vez su abrazo sólo que ahora desde un nuevo ángulo, creo que me podría hacer adicto a ellos. La sensación de sus dos voluptuosos pechos juntándose en mi espalda y aplastándose como una especie de gelatina no podía ser más reconfortante, ataques como estos son algo de temer viniendo de ella.

Como dato curioso, me di cuenta de que el uniforme de nuestra escuela esconde bastante el escote de las chicas, ya que ahora que las sentí en carne propia, me di cuenta de un aproximado de su tamaño real.

—Empecemos mañana con nuestra relación oficialmente, consideremos el día de hoy como un prólogo terriblemente escrito.

—Jeje, está bien… dado que todavía hay cosas sobre mí que debo contarte, ¡Pero a su debido momento!

—¿Te seguirás haciendo de rogar? —No pude evitar reírme un poco.

Cuando me soltó, me di la vuelta y en un movimiento raudo planté un beso en su mejilla, volviendo a mi posición anterior en menos de dos segundos estando de espaldas a ella, pude imaginar su rostro ardiendo por la vergüenza.

—H-hasta mañana —empecé a alejarme de la casa.

Un silencio imperó detrás de mí hasta que fue roto por el sonido de la puerta cerrándose.

—Uh… ¿Habrá estado eso mal?

“Fue lo mejor del día…” Escuché esa delicada y sentimental voz en mi cabeza. Sin más de que preocuparme, emprendí mi camino a casa bajo la luz de la luna.

Esta es mi vida ahora, estoy saliendo con la chica más hermosa de mi escuela después de cinco años conociéndola. Pero no sólo la más hermosa por excelencia y votación entre los grupos de chicos de todos los años, sino también la segunda más inteligente y la más popular. La chica que puede arrastrar a cualquier chico e incluso chica a su lado con una sencilla elección de palabras e incluso sin más que su presencia.

Pero aun así eso no es todo, mi novia… soy la pareja de la chica que no es ni más ni menos que lo más cercano en este mundo a Dios.

Empecé a salir con Mónica Riedel.

Chapter End Notes:

Kabe-don: Es un término en Japón usado para describir aquellas situaciones en las que el chico acorrala a la chica contra una pared, situándose muy cerca de ella con una mano apoyada en la pared detrás de ella, en otras palabras hacer una encerrona, en este caso, uno inverso siendo Mónica la que lo ejecuta.

Pueden contactarme vía discord bajo el nombre de Exosaur#7911 y también seguirme en twitter como @ExosaurX donde haré una publicación cada vez que suba un capítulo nuevo para que no se lo pierdan. Si gustan, ¡No olviden dejar una reseña/review!

You must login (register) to review.