- Text Size +

Aunque no lo crean no morí durante la noche, desperté aun dentro de la bota de Kanna, y para mi sorpresa, sin dolor alguno. Aquellas terminaciones nerviosas que resultaron dañadas, aquellas heridas y moretones que cubrían mi cuerpo, y sobre todo, aquel dolor infernal ya no estaba, es más, me encontraba realmente bien y sano, más de lo que alguna ver recordé haber estado, a pesar de estar rodeado por el fuerte olor a pies de Kanna, claro. Fue ahí donde me puse a recordar la noche anterior, no tenía muy clara la visión de lo que ocurrió, pero si ciertas cosas: Que ambas me pisotearon, quedar atrapado por horas en el culo de Kanna, ser aplastado entre medio de sus pies, ser usado como juguete sexual en un tijeretazo sin precedentes hasta el punto que mi boca se llenó de los fluidos de mi hermana (que por cierto, esos sí que aun los siento en mi boca, sabían muy fuerte), y sobre todo recuerdo 2 cosas, que Duke se rindió ante la esclavitud, y que por Jane no pasé la noche en la media de Kanna al igual que mi amigo, aunque no se bien por qué fue.

De pronto la bota se levantó en el aire y sentí como se movía todo a mí alrededor, parece que una de las chicas la agarró y salía del estudio con ella en la mano, presuntamente bajando al segundo piso. Entonces la bota se dio vuelta y caí sobre la enorme cama de mi hermana en su enorme cuarto, para ver luego que mis pequeños amigos estaban cerca, todos con tamaños distintos pero igual de desconcertados que yo. Antes de que pudiéramos hablar, nos interrumpió Ally.

- ¡Hola Esclavos! Hoy va a ser un gran día, les contaré luego como va a ser todo, pero antes Sheila y Diane me pidieron que les diera de comer, así que…

En eso Ally conjuró con su muñeca lo que parecía un hechizo, y en la palma de su mano apareció un pequeño recipiente de plástico con lo que parecía cereal de maíz con leche. Luego de todo lo que comí hasta ahora desde que me encogí, esto sin dudas era lo más sabroso que veía. No contaré las pizzas ya que por esas pequeñas hijas de puta es que estamos así.

- ¡Wow! ¿Puede crear comida de la nada Ama Ally? –Dijo Kidomaru, sacándome un poco de onda ya que no me había acostumbrado aun a su personalidad de esclavo.

- ¡Claro que no tonto! No puedo crear cosas de la nada, Sheila lo hizo abajo y yo sólo lo traje con un hechizo de desplazamiento.

- Debe ser muy útil. –Dijo Sonic.

- Claro, sobre todo cuando pierdes algo, siempre que pierdo las llaves sé cómo encontrarlas, jeje. En fin, desayunen que nos vamos en media hora.

Acto seguido Ally dejó el cuenco sobre la mesita de noche y procedió a salir del cuarto, pero poco antes de hacerlo se dio media vuelta y nos miró.

- Mmm… Cierto.

En eso nos hizo crecer hasta 10cm, lo más que habíamos tenido hasta ahora desde que nos encogimos, y nos tomó con ambas manos para dejarnos en la mesita de noche.

- Ahora sí, no se demoren esclavos. –Guiñó un ojo y se fue.

En eso los 5 nos acercamos al cuenco y empezamos a tomar, era extraño, como comer y tomar del borde de una piscina, pero era lo mejor que habíamos comido en días así que no nos quejamos y simplemente disfrutamos de la paz momentánea que nos brindó Ally… Esperen… ¿Nos dio algo de paz? Eso me parecía raro, y no tardé en hacérselos saber a mis compañeros.

- Chicos.

- ¿Si Jazz?

- No es raro que… Ya saben… ¿Ally haya sido tan amable?

- A mí no me parece raro, ella nos dijo que todo sería mejor si aceptábamos ser sus esclavos ¿no? –Dijo Sonic.

- Bueno… Sí, pero sigo sin sentirme bien al respecto.

- Te entiendo. –Dijo Kidomaru.

- ¿A sí? Pero si tú fuiste el primero en rendirse ante ellas.

- Aceptarlo, y no es por eso, es por lo que dijo Sonic. Yo me rendí antes de que empezaran a “jugar” con nosotros, y creo que he sufrido mucho menos que ustedes por lo mismo, ayer Diane me trató muy bien y Kanna no fue tan ruda antes de eso, sin mencionar que pasé un buen rato en la vagina de mi amada Ally…

- ¿Kanna no fue tan ruda contigo?

- Pues no, ¿por?

- Ayer tuve que pasar el día con ella, y es una sádica de tomo y lomo, jamás lo hubiera imaginado, es más morí por ella.

- Puede que Kidomaru tenga razón.

- ¿¡Qué dices, Duke!? ¡Pero si tú estuviste conmigo anoche, no puedes decir eso!

- No te molestes amigo, sólo escucha. En el momento en que me rendí ellas dejaron de torturarme, y pude dormir cálidamente en el pie de la mujer que amo, ósea que luego de rendirme no solo pararon, sino que mi situación se volteó a mi favor.

- Aceptarlo, no rendirse.

- No lo arruines Kidomaru.

- Entonces… Tú lo… ¿Aceptaste? –Preguntó Alfa, arqueando la ceja.

- Pues… Sí. La verdad nos estaban torturando muy fuerte y ya no podía soportar más dolor, qué puedo decir, me llevaron a mi límite. Espero que no se molesten, chicos, sobre todo tu y Jazz.

- ¿Molestarnos?

- Ya saben… Porque son los únicos que aún no han dicho que sí.

Un silencio sepulcral se hizo presente entre nosotros, empecé a mirar a Alfa a los ojos y el hizo lo mismo conmigo, no habíamos caído en cuenta de eso, pero era cierto, sólo nosotros 2 seguíamos resistiéndonos a ser los esclavos de nuestras hermanas… Tenía mucho que asimilar.

- ¿Entonces, están molestos? –Preguntó Duke, y yo respondí con lo que sentía, sin pensarlo.

- No Duke, no estoy molesto, esa fue tu decisión, y lo que les dije ayer era en serio, depende de cada uno decidir sobre esto. No comparto su decisión, pero la entiendo, sobre todo en tu caso porque lo viví contigo.

- Si, y me quedo con lo que dijiste Jazz, aunque no quiero ceder, no importa. Somos los Ghoul Hunters y eso nunca va a cambiar. –Dijo Alfa.

- Me alegra oír eso, no sabes lo culpable que me siento por lo de anoche amigo.

- No te preocupes, viejo, no pasa nada.

- Gracias al cielo… Por cierto Sonic, has estado muy callado. –Todos volteamos a mirarlo.

- …

- …

- Estoy comiendo…

Todos nos reímos por eso, y a pesar de las palabras, aquella risa en conjunto me demostraba que nuestra amistad era para siempre, sin importar las circunstancias.

- Por cierto Jazz ¿tienes un minuto?

- Sí, creo que despejaré mi apretada agenda para ti amigo.

- Jeje.

- ¿Qué, van a darse un beso con lengua y no quieren salpicar?

- ¡JA!

- No, quería decirle algo de lo de anoche, no quieres saberlo.

- Uy, cuenta.

- Créeme, Duke tiene razón, no quieres saberlo. –Ambos nos alejamos un poco del grupo y Duke procedió a hablar.

- Mira, en serio me sentí culpable por lo de anoche, te dejé solo amigo.

- Duke…

- Si se, ya me lo has dicho, pero no has hecho más que ayudarme desde que pasó todo esto, arreglaste las cosas con Tammy, mantuviste al grupo unido en un momento donde mi estado de ánimo no me permitía hacerlo, y aunque no es mucho, siento que debo devolverte el favor.

- ¿En serio vas a besarme?

- ¡QUÉ NO! ¿Por qué todos piensan eso? No te rías.

- Perdón amigo, pero es en serio, somos amigos y yo sólo quería ayudarte por lo mismo, no espero nada a cambio.

- Aun así… Verás, cuando Kanna me metió en su media pude ver poco o nada de lo que ocurrió, pero si oí todo muy claramente. Sé que “tuviste” sexo con Kanna y con tu hermana.

- Adoptada.

- Es igual. Bueno, de lo poco que vi noté que estabas físicamente destrozado, Kanna te iba a meter en su otra media, y yo sabía que si lo hacía en tu estado te mataría seguro, pero Jane la detuvo. ¿Tú viste eso?

- Bueno… Sí, pero no lo recuerdo muy bien. ¿Qué dijo mi hermana?

- Ella dijo: “No lo metas, ya sufrió mucho hoy y no quiero verlo sufrir más, por favor”.

Me quedé en blanco, no sabía que responder, por suerte Duke sí.

- Escucha, se cómo es tu relación con Jane mejor que nadie, me has hablado tantas veces de eso que no me es difícil ponerme en tu lugar. Puedes decir que no lo entiendo porque Diane es tierna y graciosa, y aunque me moleste en ocasiones, por ella se detectar cuando una persona está siendo bondadosa, y Jane lo fue contigo anoche. No me respondas ahora si no quieres, pero piensa en eso, porque por lo que vi, creo que en el fondo, muy en el fondo, Jane no es el monstruo que aparenta ser. En fin, voy a comer amigo, vuelve cuando estés listo.

El impacto fue más grande de lo que esperaba, tanto que me quedé ahí parado y no regresé a comer el cereal, tenía mucho que procesar, en serio mi hermana podía llegar a ser ¿buena? Me costaba creerlo, así que me remití a los hechos. Mis padres biológicos murieron en un accidente de auto mientras salían del hospital luego de que mi madre quedó de alta tras el parto, gracias a Rachel yo no morí con ellos, y rápidamente encontré una nueva familia en mis padrinos, sus mejores amigos. Jane tenía sólo 2 años cuando llegué a sus vidas, y siempre me pareció que me odiaba, odiaba al niño nuevo que le quitó la vida que tenía ¿Por eso me odiaba? Eso creo pero no estoy seguro, siempre fui distante con mi hermana por lo mismo, me trataba muy mal y hasta el día de hoy lo hace (evidentemente) pero aun así caí en cuenta de una cosa, John y Clara son los padres más amorosos del mundo, claro cuando no están trabajando, y Julie es la niña más tierna que haya pisado este planeta ¿por qué Jane no era igual? ¿Era la oveja negra de la familia? Aún tenía muchas dudas, pero creo que Duke tiene razón, Jane no es simplemente malvada, es más que eso, y tenía que descubrir por qué.

Sin darme cuenta la media hora pasó y yo no había comido nada, ni tuve la oportunidad ya que me quedé ahí parado todo ese rato hasta que mi trance fue interrumpido por “las 5 hermanas gigantas”… No, ese nombre apesta, seguiré pensando en otra opción luego.

- Bien pequeños, ¿ya comieron? –Dijo Ally.

Los 4 asintieron, yo me quedé en silencio.

- Ok, bueno creo que es hora de decirles el plan que tenemos para hoy, ustedes, nosotras y las niñas iremos: ¡A LA PLAYA! –Dijo Diane.

- ¿¡A LA PLAYA!? –Respondimos todos asombrados.

- Pues sí, pasaremos todo el día y la noche en Malibu, y si es necesario varios días más, pero no se preocupen, yo nos transportaré allí para que no perdamos tiempo, y hablando de día… –Ally aparece con su truquito la ruleta con nuestros nombres, revelando con quien nos tocaba hoy:

 

 

- No crean que porque cambiamos de panorama la giganta que les toca también cambia, no no no, cada una estará a su cuidado por lo que dure el viaje, pero debo decirles que el hechizo de tele transportación consume mucha magia así que no podré revivirlos si mueren, ya que el bucle temporal sólo está presente dentro de la casa.

Todos nos asustamos por eso último, mientras estuviéramos afuera, esa podía ser nuestra última vida.

- Pero no teman, Ally lo pensó todo para que no les pase nada.

- Sheila tiene razón pequeños, mientras dormían los curé y les puse un hechizo de resistencia supremo, es muy fuerte y los protegerá si algo ocurre, pero no es perfecto y durará sólo hasta mañana, aunque si descanso lo suficiente esta noche podría conjurarlo mañana otra vez, en caso que extendamos nuestro viaje. Es lo mejor que pude hacer.

Luego de eso nos aliviamos un poco, pero que el nerviosismo estaba en el aire lo estaba. A Sonic y Kidomaru les tocaban las 2 gigantas más peligrosas, espero que se hayan satisfecho lo suficiente con Duke y conmigo y no necesiten torturarlos tanto a ellos. Duke se quedó con Sheila y Alfa con su hermana, pero por lo que ella dijo de su falta de magia post tele transportación no creo que lo pase tan mal como sería posible. Lo que me dejaba con Diane, cada chica recogió a su pequeño del día y ella no fue la excepción conmigo. Me miró y sonrió inocentemente.

- ¡Nos vamos a divertir mucho luego, Jazz, jiji!

- ¿Después? ¿Y para ahora no tienes nada planeado? –Dijo Kanna.

- Pues no, la verdad.

- No quiero meterme, pero considerando que lo tuve ayer, creo que puedo recomendarte una forma de jugar divertida que se me ocurrió, amiga, ven conmigo al baño del primer piso en 5 minutos, lo prepararé contigo antes de salir.

- ¿No le dolerá, Verdad? Te conozco Kanna.

- Créeme, no le va a doler, es más creo que lo va a amar, jejejeje.

- ¿En serio? ¡Pues bien, te veo en 5!

La seguridad momentánea que me generó el haber sido puesto con Diane se desvaneció luego de eso, Kanna tenía una idea para mí, y no me importa lo que le haya dicho a Diane, seguramente no me iba a gustar para nada…

You must login (register) to review.